Ni los grandes criptólogos han conseguido descifrar este manuscrito.
Son aproximadamente 200 páginas y puede que se publicase en la primera mitad del siglo XIII.
A comienzos del siglo XX, un coleccionista de arte de Nueva York llamado Wilfrid Voynich, visita la Villa de Mondragone, cerca de Roma, donde encuentra en un baúl un libro distinto a los demás, cuyo último propietario fue Athanasius Kircher.
Dedicó toda su vida al estudio de este libro ( al que se le nombró con su nombre) sin conseguir nada.
Actualmente el manuscrito Voynich se conserva en la biblioteca de libros raros Beinecke, en la Universidad de Yale.
Los dibujos del libro hacen pensar que trata sobre botánica y plantas medicinales, de dónde se encuentran y para qué sirven.
Después, hay páginas con dibujos astronómicos, pero sin llegar a una conclusión. También salen mujeres bañándose en un lago, lo que puede significar que son baños medicinales o muestra la fuente de la juventud
Wilfrid Voynich descubre que el autor podía ser Jacobus de Tepenecz, conocido médico medicinal que curó a Rodolfo II de Bohemia, en una página donde aparece este nombre rallado.
En una carta de Georgius Barschius ( dueño del libro entre 1622 y 1665) a Athanasius Kircher, decía que Rodolfo II compró el manuscrito por 600 ducados para su colección de ocultismo.
En esta carta se cita a otro posible autor, Roger Bacon, ilustre clérigo inglés del siglo XIII apodado " Doctor Milagro", que fue uno de los primeros que se preocuparon por la óptica, explicando el arco iris y la reflexión y refracción, y diseñando lentes, por lo que pudo ver las primeras células en la Historia.
Los dibujos enigmáticos pueden ser células conceptuadas en la época, siendo también un libro de apuntes científicos.
El idioma no se ha podido descubrir, siendo un auténtico código, por lo que es llamado idioma voynichés.
No se ha encontrado ningún síntoma de fraude en los análisis científicos por lo que es un misterio sin resolver...
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